Descubre la historia de la moneda Real de Guinea Portuguesa

Si eres un apasionado de la numismática o simplemente te interesa la historia de las monedas, seguramente habrás oído hablar de la moneda Real de Guinea Portuguesa. Esta moneda tiene una historia fascinante que se remonta a la época colonial de Portugal en África, y hoy te contaremos todo sobre ella.

Orígenes de Guinea Portuguesa

En el siglo XV, Portugal comenzó a explorar la costa occidental de África con el objetivo de encontrar una ruta marítima que le permitiera llegar a Asia y establecer rutas comerciales con los países del este. En 1446, los portugueses llegaron a lo que hoy es Guinea-Bissau, y en 1471 fundaron el primer asentamiento europeo en la región, la ciudad de Cacheu.

Durante los siglos siguientes, Portugal estableció una serie de colonias en la región, incluyendo las actuales Guinea-Bissau, Cabo Verde y Guinea Ecuatorial. Estas colonias se conocían colectivamente como Guinea Portuguesa.

La moneda Real de Guinea Portuguesa

A finales del siglo XIX, Portugal comenzó a emitir una serie de monedas para sus colonias africanas, incluyendo la moneda Real de Guinea Portuguesa. Esta moneda se acuñó por primera vez en 1887 y se utilizó en la región hasta la década de 1950.

La moneda Real de Guinea Portuguesa estaba hecha de plata y tenía un valor nominal de 1000 reis. En el anverso de la moneda se encontraba la imagen del rey portugués Carlos I, y en el reverso se podía ver el escudo de armas de Portugal rodeado por la inscripción "GUINEA PORTUGUESA".

El fin de Guinea Portuguesa

En 1951, Portugal concedió a sus colonias africanas un estatus de provincia, lo que significaba que se les otorgó un mayor grado de autonomía. Sin embargo, esta autonomía fue limitada y Portugal siguió manteniendo el control político y económico de la región.

En la década de 1960, los movimientos de liberación nacional comenzaron a ganar fuerza en toda África, y Guinea-Bissau no fue una excepción. En 1973, el Partido Africano para la Independencia de Guinea y Cabo Verde (PAIGC) declaró la independencia de Guinea-Bissau, y Portugal finalmente reconoció la independencia en 1974 tras una revolución en Portugal que derrocó al régimen autoritario del país.

Conclusión

La moneda Real de Guinea Portuguesa es un recuerdo de la época colonial de Portugal en África y de la lucha por la independencia de las colonias africanas. Aunque ya no se utiliza como moneda de curso legal, sigue siendo una pieza importante en la historia numismática de la región.

Preguntas frecuentes

¿Qué otros tipos de monedas se utilizaron en Guinea Portuguesa?

Además de la moneda Real, Portugal emitió una serie de otras monedas para sus colonias africanas, incluyendo el escudo portugués y el real portugués.

¿Por qué Portugal estableció colonias en África?

Portugal estableció colonias en África con el objetivo de encontrar una ruta marítima que le permitiera llegar a Asia y establecer rutas comerciales con los países del este.

¿Cómo afectó la autonomía concedida a Guinea Portuguesa a la región?

La autonomía concedida a Guinea Portuguesa en 1951 fue limitada y Portugal siguió manteniendo el control político y económico de la región.

¿Cómo se utilizó la moneda Real de Guinea Portuguesa?

La moneda Real de Guinea Portuguesa se utilizó como moneda de curso legal en la región durante décadas, hasta que las colonias africanas obtuvieron la independencia de Portugal.

¿Qué sucedió con la moneda Real después de la independencia de Guinea-Bissau?

Después de la independencia de Guinea-Bissau, la moneda Real dejó de utilizarse como moneda de curso legal en la región.

¿Dónde puedo encontrar monedas Real de Guinea Portuguesa hoy en día?

Las monedas Real de Guinea Portuguesa son piezas numismáticas raras y pueden ser difíciles de encontrar. Si estás interesado en adquirir una, es posible que desees buscar en subastas especializadas o en tiendas de antigüedades.

¿Cuál es el valor actual de la moneda Real de Guinea Portuguesa?

El valor de la moneda Real de Guinea Portuguesa varía según su estado de conservación y su rareza. Algunas monedas pueden valer varios cientos o incluso miles de dólares, mientras que otras pueden tener poco valor en el mercado numismático.